jueves, 11 de agosto de 2011

Similitudes...

Bueno, pues tras el anuncio de la huelga de futbolistas españoles de primera y segunda división, parece que nos vamos a quedar unas semanas sin fútbol. Por mi estupendo, la verdad es que hace años sí que era un fanático del fútbol, pero cada día me ha ido dando tanto asco que ya hasta casi que prefiero que no haya fútbol.

Pero leyendo las primeras líneas de la noticia de hoy, según la leía en la versión digital de El País, y copio literalmente. "Es una situación lamentable, a los futbolistas no se les puede decir nada, no se les puede pedir más. No queremos más dinero, queremos que se cumplan nuestros contratos. Que se vele por las deudas pasadas, presentes y futuras". Palabras de Luis Rubiales, presidente de la Asociación de Futbolistas Profesionales.

No hay que ser precisamente Sherlock Holmes para observar paralelismos con el tema estrella de este blog, ¿verdad? Profesionales "de élite, muy bien pagados, privilegiados" que se rebelan contra sus clubes, contra la situación actual del fútbol, en la que los despidos, expedientes de regulación, impago, etc, afectan a decenas de clubes de las categorías profesionales del balompié.

Pues qué queréis que os diga, yo lo veo perfecto que hagan huelga, y si es necesario que no jueguen en un mes, o dos, o que se nieguen a entrenar. Como bien dicen, están luchando por sus derechos laborales, por sus garantías del sustento que les da de comer a ellos y sus familias.

Y claro, no todos los futbolistas profesionales de este pais son Casillas, Puyol o Xabi Alonso, con sueldos millonarios. También hay muchos otros futbolistas de clubes de segunda y segunda división B que cobran una miseria, si llegan a cobrarla, o incluso tienen que buscarse la vida trabajando en otro oficio en su tiempo libre. Habrá futbolistas que lleguen a los 5 o 6 millones de euros netos por temporada, pero hay otros que solo sobrepasan el salario mileurista. Pero claro, aquí no hay "sueldo medio" de futbolista. Por supuestos, estos sueldos han sido acordados con sus jefes, los dueños de los equipos,que acceden a firmar el contrato y aceptan el salario acordado, sea el que sea.

La principal diferencia es que ellos, si van al paro, no dejan a nadie en tierra con sus vacaciones programadas yéndose por el retrete, pero siendo el pais que somos, y siendo como somos, ¿cómo reaccionará el gran público cuando le quiten el opio que mueve a la mitad de la sociedad española? ¿Cómo aguantarán millones de seguidores al fútbol este movimiento laboral? ¿Y los socios que pagan su abono anual para ver a su equipo?

Podemos estar tranquilos, al final la situación se desbloqueará, habrá un par de decretos que digan que los futbolistas no pueden hacer huelga porque para algo son el desvío de atención de lo que realmente importa en este pais, y si no, pues ya los militarizarán y los pondrán a trabajar aunque no vayan a poder cobrar su salario, ni puedan conciliar vida laboral y personal, o cualquier otra reclamación que hagan.

Convenio Colectivo, D.E.P.